Vesna Vulovic: Caída libre desde 10.000 metros de altura
En enero de 1972, Vesna era una azafata de 22 años en un DC-9 de la JAT
(aerolíneas yugoslavas) que despegó de Copenhague con destino a
Belgrado. Tras una hora de vuelo, la nave exploto en el aire debido,
supuestamente, a una bomba plantada por Ustaša, (un grupo terrorista de
origen Croata), partiéndose en varios pedazos el avión sobre las
montañas nevadas de la entonces Checoslovaquia.
Vesna quedó aprisionada por un carrito del catering en el fuselaje del
avión, y cayó a más de 10.000 metros de altura hacia el suelo, en unas
temperaturas de menos de 50 grados bajo cero. Milagrosamente, sobrevivió
el siniestro en el que perecieron 27 personas, todos los pasajeros y el
resto de la tripulación.
En 1985 obtuvo un Récord Mundial Guinness por sobrevivir "la caída libre
más alta sin paracaídas". Ni ella ni nadie se explica cómo pudo
sobrevivir al trágico accidente que la dejó en coma durante varios días,
le partió tres vértebras y las dos piernas, y le produjo una parálisis
temporal.
Tras varias operaciones consiguió volver a andar, aunque
todavía cojea. Y cuando quiso volver a volar, apenas nueve meses después
del suceso, la JAT le dio un puesto administrativo en tierra que
mantuvo hasta que "me forzaron a jubilarme antes de tiempo por mi
postura anti Milósevic".