Henry Ziegland.
En 1883, Henry Zieglang finalizó la relación que mantenía con su novia de manera precipitada. A los pocos días de la ruptura, presa de su gran pena, ella
se suicida.
Su querido hermano consumido por la ira se presentó en la casa de Henry disparándole a bocajarro, para momentos después, quitarse la vida de un tiro en la cabeza.
se suicida.
Su querido hermano consumido por la ira se presentó en la casa de Henry disparándole a bocajarro, para momentos después, quitarse la vida de un tiro en la cabeza.
Afortunadamente Henry sobrevivió, la bala solo le había rozado la cara y se había incrustado en un robusto árbol de su parcela.
Un año después de lo ocurrido, Henry decidió talar el árbol que tan malos recuerdos le daba y al verse incapaz de serrarlo por su robustez decidió dinamitarlo, con tan mala suerte que debido a la explosión, la bala que aun seguía incrustada en su corteza le atravesó la cabeza.