Ubicada
en San José, California, esta mansión victoriana fue mandada
levantar por Sarah Winchester, viuda del inventor del rifle de
repetición
Samuel Winchester. Más de 38 años duraron las obras, y es que la casa siempre estuvo en continua construcción hasta la muerte de Sarah en 1922. Hoy por hoy se considera el lugar más embrujado de todos los Estados Unidos y por ello es uno de los lugares más visitados de todo el país.
La mansión alberga 160 cuartos, que incluyen 40 habitaciones, 6 cocinas, 2 sótanos, 7 pisos, 476 puertas, 10.000 ventanas con paneles, 47 chimeneas, 52 tragaluces, 2 vestíbulos y 3 ascensores. Aunque por fuera parezca de lo más normal, la casa está llena de cosas inconclusas y que no tienen sentido, como las escaleras y puertas que no van a ninguna parte.
Samuel Winchester. Más de 38 años duraron las obras, y es que la casa siempre estuvo en continua construcción hasta la muerte de Sarah en 1922. Hoy por hoy se considera el lugar más embrujado de todos los Estados Unidos y por ello es uno de los lugares más visitados de todo el país.
La mansión alberga 160 cuartos, que incluyen 40 habitaciones, 6 cocinas, 2 sótanos, 7 pisos, 476 puertas, 10.000 ventanas con paneles, 47 chimeneas, 52 tragaluces, 2 vestíbulos y 3 ascensores. Aunque por fuera parezca de lo más normal, la casa está llena de cosas inconclusas y que no tienen sentido, como las escaleras y puertas que no van a ninguna parte.
Hagamos
un recorrido por esta maravillosa casa que seguro que a más de uno
le ha puesto los pelos de punta por todas las leyendas y secretos que
encierra:
Esta es Sara Winchester, que fue convencida por una médium de la época, de que su familia estaba bajo una maldición por las muertes ocasionadas por los rifles que había intentado su ya difunto marido. También le dijo que para evitar que los espíritus no la molestaran, debía construir una casa que nunca debía terminar, para que los fantasmas nunca tuvieran un lugar donde vivir.
Esta es Sara Winchester, que fue convencida por una médium de la época, de que su familia estaba bajo una maldición por las muertes ocasionadas por los rifles que había intentado su ya difunto marido. También le dijo que para evitar que los espíritus no la molestaran, debía construir una casa que nunca debía terminar, para que los fantasmas nunca tuvieran un lugar donde vivir.
Desde
aquel momento en su casa no cesaban nunca los ruidos de los martillos
y el ir venir de de los obreros. Dio trabajo durante años una legión
de constructores, carpinteros y decoradores, para embarcarlos en un
proyecto sin fin que duraría 38 años.
Es
estilo victoriano de la mansión se hace presente en cada rincón de
la casa. En su construcción invirtió más de 5 millones y medio de
dólares durante principios del s. XX, que hoy equivaldrían a unos
71 millones.
Esta
es una de las 6 cocinas. Si os fijáis, en el techo hay una puerta
que no conduce a ninguna parte, un rasgo muy característico de la
casa.
Otro
rasgo característico que es en la casa había baños, como es
lógico, pero muchos de ellos eran falsos y no se podían utilizar.
Otra
manía de esta excéntrica señora, es que sólo había dos espejos y
una bañera en toda la casa, por miedo a que los fantasmas vieran su
reflejo, pues es algo que ellos temen según la médium.
Pasarelas, pasillos, escaleras y puertas que no conducen a ninguna parte. Una casa laberíntica en toda regla. De hecho, una de las recomendaciones que te dan cuando vas a visitarla, es que no vayas solo en ningún momento porque si te pierdes no garantizan que puedan encontrarte.
Se dice que la mujer era capaz de pasar a través de las paredes, pero una revisión minuciosa de la casa nos hizo saber que existían varios escondites secretos para controlar el trabajo del personal de la casa sin ser vista.
Pasarelas, pasillos, escaleras y puertas que no conducen a ninguna parte. Una casa laberíntica en toda regla. De hecho, una de las recomendaciones que te dan cuando vas a visitarla, es que no vayas solo en ningún momento porque si te pierdes no garantizan que puedan encontrarte.
Se dice que la mujer era capaz de pasar a través de las paredes, pero una revisión minuciosa de la casa nos hizo saber que existían varios escondites secretos para controlar el trabajo del personal de la casa sin ser vista.